31 marzo 2012

Poema de amor churro

Si llegaran los marcianos,
bailando chachachá,
a ti yo te llevaría,
al espacio sideral.

Si fuera un robot policía,
tus besos recordaría,
con gran alevosía.

Si yo fuera un vampirito,
que brillara con el Sol,
a besos te comería,
sin hacerte el amor.

Si yo fuera un vaquero intergaláctico,
o un gángster mexicano,
yo a ti te rescataría,
de marcianos y de charros.

Si a ti te persiguieran,
robots matones del futuro,
te protegería,
y te cuajaría un chamaco.

06 marzo 2012

Instante


Miraba sonrisas tuyas en timeline,
segundo a segundo, frame por frame.

Muteé la barra de audio para mirar tus blancos gestos,
incluso, me parece haberla eliminado.

No tardé en encontrar el justo instante de tu sonrisa en cumbre,
en siete frames se forma y en nueve la escondes.
Estoy seguro, conté con la flecha del teclado.

Todas tus sonrisas terminan con un dejo de vergüenza,
que solo se nota en slow-motion.

Felicidad;
saborear todas,
escoger tu mejor instante,
imperceptible para mi ojo desnudo,
que se dilata al mirarte, aún frente al monitor,
y bendecir una máquina,
que me deja ver tus sonrisas cuadro a cuadro
y que genera memoria tangible y permanente de tu alma.

01 marzo 2012

La miré al fondo de la habitación, detrás de una mesa mal decorada, con un mantel de terciopelo azul y un montón de botellas de agua. Estaba bajo una horrible luz verdosa, eran las ocho de una nublada mañana en algún lugar de la horrible capital.

Me saludó extrañada y yo con timidez.
Me dio una carpeta, un libro y una pluma.

Nos sonreímos.

El tiempo no se detuvo, ni se hizo más lento.
El ruido no disminuyó.
Tampoco las luces se hicieron cálidas.

Y sin embargo, lo supe.